Bicarbonato de sodio: el aliado secreto para correr más rápido y por más tiempo 🏃♂️💨
Si llevas tiempo corriendo, seguro has escuchado de geles, electrolitos y proteínas… pero ¿bicarbonato de sodio? Sí, ese polvo blanco que tienes en la cocina puede ser una herramienta para mejorar tu rendimiento en entrenamientos intensos y carreras.
¿Cómo funciona?
Cuando corres a alta intensidad, tus músculos producen ácido láctico, lo que causa esa sensación de ardor y fatiga. El bicarbonato actúa como un “amortiguador” que ayuda a neutralizar la acidez, retrasando la fatiga y permitiéndote mantener un ritmo fuerte por más tiempo.
Beneficios para corredores
Mayor resistencia a la fatiga: Ideal para entrenamientos de intervalos, series cortas y competencias explosivas.
Rendimiento en pruebas de media y larga distancia: Puede darte un empuje extra en los últimos kilómetros.
Recuperación más rápida: Al ayudar a equilibrar el pH, tus músculos se recuperan mejor.
Cómo usarlo
Los estudios sugieren una dosis aproximada de 0.3 g por kilo de peso corporal, tomada 60–90 minutos antes del esfuerzo intenso. Por ejemplo, si pesas 60 kg, serían unos 18 g (aprox. 1 cucharada sopera). Ojo: esto debe probarse primero en entrenamientos, no el día de la carrera, ya que puede causar malestar estomacal en algunas personas.
Precauciones
Empieza con dosis pequeñas para ver cómo reacciona tu cuerpo.
Hidrátate bien, ya que el bicarbonato aumenta la retención de líquidos.
Consulta a un profesional de la salud si tienes problemas de presión arterial o riñones.
💡 Conclusión: El bicarbonato no es magia, pero puede ser un complemento interesante en tu arsenal como corredor, sobre todo en entrenamientos de alta intensidad. Pruébalo de forma gradual y siempre acompañado de una buena estrategia de entrenamiento y nutrición.