Cómo no perder el ritmo cuando corres 🏃♂️💨
A todos nos ha pasado: empiezas la carrera con toda la emoción… y a mitad de camino sientes que te estás apagando. Mantener el ritmo no es magia, pero sí es cuestión de estrategia (y un poquito de paciencia).
1. No te emociones demasiado al inicio
Es fácil dejarte llevar por la adrenalina y salir más rápido de lo que deberías. Respira, checa tu reloj y recuérdate que la carrera es larga.
2. Encuentra tu “ritmo cómodo”
Ese punto donde sientes que podrías correr y conversar sin quedarte sin aire. Empieza ahí y ajusta poco a poco.
3. Entrena como quieres correr
Haz entrenamientos de tempo (ritmo constante) y algunos fartlek (jugar con cambios de velocidad) para que tu cuerpo se acostumbre a sostener un paso estable.
4. Alimenta la máquina
En distancias largas, un gel o sorbo de agua en el momento correcto puede salvarte el ritmo.
5. Guarda un poquito para el final
La meta no es cruzar exhausto y arrastrando los pies, sino terminar sintiéndote fuerte.
💡 Tip rápido: en tus entrenamientos, intenta que los últimos kilómetros sean un poquito más rápidos que los primeros. Así le enseñas a tu cuerpo a apretar cuando más lo necesita.
Si quieres, puedo hacer otro igual de casual sobre respiración al correr, para que tengas material que combine con este.